domingo, 7 de septiembre de 2008

Disfrutando a Oliverio Girondo

No sé,
me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;
un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero,
al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida.
Soy perfectamente capaz
de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias;
¡pero eso sí! - y en esto soy irreductible –
no les perdono,
bajo ningún pretexto,
que no sepan volar.
Si no saben volar
¡pierden el tiempo las que pretenden seducirme!
(fragmento popularizado en la película de Eliseo Subiela, "El lado oscuro del corazón" -1992-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario