El mágico Teatro Negro de Praga

El Dr. Frankestein viaja por Europa y tiene un bebé. La voz y la música cuentan la historia en dos partes, envolviendo la platea de decenas de niños y niñas de hogares de acogida, invitados estelares a la primera función del Teatro Negro de Praga en Santa Cruz de la Sierra esta noche. Las luces se apagan y el silencio, a pesar de que la mayoría de edad promedio en sala no pasa de los doce años, agranda la caja negra en la que se ha convertido el escenario. La magia nos invade, la fantasía recrea la mente, el asombro enmudece al más escéptico. ¿Qué es real, qué es ilusión? Actores que vuelan, maletas que saltan, luna que mengua, marino que navega, instrumentos que bailan... Los colores son cosas, los objetos tienen vida propia... ¡Qué espectáculo! ¡Qué momento único y excelente! Esta noche fuimos parte del arte checo universal, de la puesta en escena de una de las compañías trotamundos más famosas del planeta y compartimos el secreto regocijo de vivir talento, esfuerzo y genialidad.